Bloodhound SSC: el supersónico con potencia de 180 autos de Fórmula 1

bloodhound • oct. 06, 2015

Cuando me enteré la potencia y velocidad que puede alcanzar un Fórmula 1 entendí por qué es la máxima categoría del automovilismo. En el deporte motor, no hay auto que pueda alcanzar sus límites: aproximadamente 850 hp y más de 350 km/h. Por eso, leer que en Londres presentaron un vehículo con potencia comparable a 180 monoplazas de la categoría reina, simplemente, me desconcertó.

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En Reino Unido se viene desarrollando el denominado “Bloodhound SSC (Super Sonic Car)”, el segundo “auto-cohete” construido por el equipo SSC, con el que buscan romper el actual récord de velocidad que es de 1,232.93 km/h, logrado por ellos mismos en octubre de 1997 con el Thrust SSC. Sus características son impresionantes y hasta descabelladas.

Tan potente como 180 autos de F1

Si el Thrust SSC tenía una potencia similar a 145 monoplazas de la Fórmula 1, el nuevo supersónico es comparable con 180 vehículos de ‘El Gran Circo’. El Bloodhound SSC está equipado con un motor de avión caza de 135 mil caballos de potencia y, según afirman, es capaz de ir más rápido que una bala. No es para menos, no olvidemos que su predecesor rompió la barrera del sonido.

Su construcción empezó en el 2007 y, tras 8 años de investigación y ensamblado, hizo su primera aparición en público los últimos días de septiembre del 2015 en Londres. Los planes del equipo son grandes. Con el Bloodhound SSC buscarán alcanzar los 1,287 km/h en el desierto de Hakskeen Pan, Sudáfrica, en el 2016; mientras que en el 2017 el objetivo es superar los 1,600 km/h.

“Queremos situar el listón muy alto para que sea muy difícil superarlo”, explicó Richard Noble, director del proyecto.

Entre otros detalles mecánicos, el Bloodhound SSC está propulsado por tres motores que se activan progresivamente para aumentar la potencia: un Jaguar V8, un reactor Rolls-Royce, usados también en los aviones de combate Eurofighter Typhoon, y cohetes Nammo.

Por otro lado, el habitáculo se parece mucho al de un avión de combate (caza) -con cámara de oxígeno incluida-. “El desafío tecnológico es enorme. Imagínese: las cuatro ruedas girarán a 117 rotaciones por segundo. Es una máquina increíble”, agregó Noble. El piloto encargado de lograr la hazaña a bordo será, nuevamente, Andy Green.

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