Competencia de cabezales ¿De qué se tratan?
Cada año, en diferentes partes del Ecuador, ocurre una carrera de pesos pesados. Parques o avenidas comunes y corrientes se transforman en pistas en donde cientos de conductores de transporte pesado, demuestran sus destrezas.
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Sonidos de bocina y rugidos de motor. Es así como se presenta el escenario de la Copa de Cabezales realizada este año en Quito. El parque Bicentenario es el espacio perfecto para que más de 60 vehículos pesados, compitan para determinar, quién es el mejor conductor y cuáles son las mejores maniobras realizadas por estos pilotos.
El 2015 fue el primer año de la Copa Cabezales para la ciudad de Quito, sin embargo, en Latacunga, Yahuarcocha y Saquisilí , esta práctica es común. Consiste en una carrera de obstáculos y velocidad entre varias categorías de transporte pesado. Miles de personas son fanáticas de este tipo de competiciones y asisten a estos eventos con el objetivo de apostar por su campeón.
Un día antes de la competencia realizada en Quito, todos los competidores se reunieron al sur de la ciudad para hacer un desfile de luces. Desde las 20:00 horas, los cabezales pasearon por la Plaza Grande, la Avenida 10 de agosto hasta desembocar en el lugar de la competencia: El Parque Bicentenario.
Al día siguiente, la competencia empieza desde las 8h00 horas. Cabezales de marcas como Kenworth de la montaña, International o Freightliner esperan a que sus dueños realicen los respectivos trámites de inscripción. A cada uno se le entrega su respectivo número para competir y un uniforme especial para el piloto y copiloto.
La competencia empieza a las 11h00. Pruebas de habilidad y de velocidad. El ganador no es el que mejor piruetas logre ni el que menor tiempo haga, es la suma de todas las cosas la que otorga el premio al mejor.
Desde esquivar conos plásticos hasta manejar en reversa, son algunas de las pruebas que estos pilotos deben hacer de la mejor forma posible con el fin de lograr sus objetivos. La competencia se maneja con muerte súbita, es decir, quien pierde una de las pruebas, debe abandonar la competencia.
Un cabezal pesa entre 8 y 9 toneladas y puede alcanzar velocidades de hasta 140 km/h, pero en las carreras, debido a que las rectas alcanzan los 800 metros, las velocidades no sobrepasan los 80 km/h.
Para poder competir, estos tráileres deben tener 10 llantas y cabezales completos. Para ganar el cariño del público es importante la decoración. Cada persona ornamenta a su gusto, desde luces Led ultra brillantes en los aros hasta luces de Xenón. Mientras más llamativo y colorido, mejor.
Los vehículos que compiten en la copa Cabezales, tienen motores de 450, 500 y 680 HP, con cajas de 10, 15 y 18 marchas. Transmisiones de 40, 42 y 48 libras y pueden arrastrar de 30 a 48 toneladas. Controlar la fuerza de este motor y cambiar las marchas en el tiempo determinado en la competencia, requieren de un conocimiento amplio.
“Maniobrar estos vehículos requiere de experiencia. Cuando uno gana, gana el nombre, además de representar de la mejor manera a la compañía a la que pertenece” comenta Xavier Muñoz, organizador de la Copa de Cabezales de Quito 2105.
La competencia de cabezales se la realiza cada año en diferentes partes del país. Es un espectáculo interesante que demuestra la habilidad del conductor de transporte pesado.
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