¿Los videojuegos nos ayudan a ser mejores conductores?
Los gamers ahora tendrán una buena excusa para continuar en el juego. Según un estudio realizado por la New York University Shanghái, los videojuegos mejoran nuestras habilidades frente al volante.
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Ciertamente todos, en alguna ocasión, hemos sido seducidos por un videojuego ya sea en una consola o en la propia computadora. En nuestro caso, el vicio se intensifica cuando nos topamos con juegos relacionados a los autos como Need For Speed (¿Y quién no lo conoce?)
En este contexto, no ha sido extraño escuchar que más de un gamer ha sentido que sus habilidades de manejo mejoraron. Durante mucho tiempo, esta idea estuvo suspendida como un supuesto; sin embargo, una investigación internacional ha logrado aterrizarla.
CINCO HORAS SEMANALES
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De acuerdo con un estudio de la New York University Shanghái, en China, los videojuegos mejoran las habilidades en la conducción ayudando a sus usuarios a mejorar su coordinación visomotriz, principalmente su sensibilidad al contraste y atención visuoespacial.
Así, ‘’jugar videojuegos sobre autos y de acción unas cinco horas a la semana puede ser una herramienta barata para mejorar habilidades básicas utilizadas en la conducción’’, según afirma Li Li Rongrong Chen y Jing Chen, responsable de la investigación.
Asimismo, agregó que ‘’los diferentes efectos de los videojuegos de conducción en el sistema sensoriomotor sugieren que tanto para los conductores experimentados (que tienen un control estable pero necesitan mejorar algunas de sus capacidades) y noveles, el entrenamiento con estos juegos electrónicos, en lugar de conducir en la vida real, es más eficaz’’.
¿CÓMO LOGRARON ESTA CONCLUSIÓN?
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Los resultados se obtuvieron a partir del uso de un simulador durante un periodo de seis meses. Gracias a ello los investigadores asiáticos analizaron y compararon la evolución en las habilidades de dos grupos de personas que jugaban videojuegos entre cinco a diez horas semanales y las que no.
Posteriormente, estas personas fueron sometidas a diversas pruebas de manejo y notaron que los primeros obtuvieron mejores resultados que quienes no tuvieron ninguna tipo de interacción con estos juegos. Increíble, ¿no?
Los resultados dieron a conocer que la experiencia previa con los videojuegos sí modifica las habilidades de un individuo frente al volante. De hecho, no solo llegaron a esa determinación sino que también se concluyó que el juego era determinante.
Así, mientras un grupo de jugadores disfrutaban de diez sesiones con Mario Kart, otros lo hacían con el juego Roller Coaster Tycoon III. Finalmente, el primer grupo de gamers obtuvo mejores resultados en las pruebas visomotrices.
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