¿Ruidos en el auto? En esta lista encontrarás la posible causa y la solución

autos nuevos • nov. 18, 2015

Te ha pasado que vas tranquilo manejando y de pronto escuchas un ruido producido por tu auto. Si bien al inicio no debes inquietarte tampoco debes ignorarlo. Estos sonidos algunas veces son producto de gomas resecas o de una tuerca floja, pero en otras ocasiones suelen indicar el comienzo de una gran avería mecánica. Para que los sepas identificar y tengas una idea de su posible causa hemos elaborado esta lista.

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RUIDOS EN EL INTERIOR

Traqueteos en la parte posterior. Si lo escuchas cuando pasas con tu auto por un ‘bache’ es muy probable que alguna tuerca o herramienta este suelta.

Solución: Revisa si la tuerca que fija tu llanta de repuesto está bien apretada, además procura que todos los elementos sueltos en tu auto estén bien sujetos.

Crujidos al soltar cualquier pedal. ¡No te alarmes! No tendrás que ir al mecánico para que te desmonte la caja y revise el embrague, desarme los frenos, o revise el cable del acelerador.

Solución: Es muy probable que para desaparecer este sonido solo tengas que lubricar (con grasa en aerosol) las articulaciones de los pedales.

Chasquidos y chirridos. En el caso de los chasquidos es muy probable que las zonas revestidas con plástico (puertas, pilares y tablero) estén resecas o se estén rozando con otro elementos, mientras que los chirridos pueden ser ocasionados por la falta de lubricación de una pieza metálica en los asientos, cerradura y articulación de las puertas.

Solución: Con los chasquidos prueba lubricando las zonas con silicona y si eso no funciona puedes intentar colocando cinta de fieltro. Para desaparecer los chirridos intenta engrasar los pernos de sujeción de los asientos, la cerradura y las articulaciones de las puertas.

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RUIDOS DEBAJO DEL CAPÓ

Aleteo. Si tienes la sensación de que suena igual a una gallina tratando de volar es casi seguro a que una de las correas que mueven el alternador, compresor del aire acondicionado u otro elemento más, está deshilachada.

Solución: Realiza una inspección visual y si efectivamente una correa está deshilachada lo mejor es no mover el auto hasta reemplazarla.

Traqueteos. Si esta vez los escuchas debajo del capó es muy posible que los pernos del anclaje o la tuerca central del amortiguador estén sueltos también es probable que las gomas de la barra estabilizadora estén resecas.

Solución: Asegúrate que todos los pernos del amortiguador estén bien sujetos, en caso el sonido es producido por las gomas de la barra estabilizadora lleva tu auto a un taller para que las revisen, lubriquen o las reemplacen.

Golpe seco. Si esto es acompañado con una excesiva vibración es casi seguro de que un (tal vez más de uno) soporte del motor este roto.

Solución: Conduce despacio tu auto hasta el taller para que el mecánico reemplacen el o los soporte defectuoso.

Golpeteo. Si este ruido aparece luego de que hiciste una instalación eléctrica a tu auto, revisa que los cables no estén sueltos o se encuentren bien sujetos a la carrocería.

Solución: Revisa las agarraderas de los cables y para minimizar las probabilidades de que suceda estos ruidos envuelve esas zonas con goma espuma.

RUIDOS EN EL MOTOR

Sonido hueco. Si el ruido aumenta con la carga del motor y disminuye a medida de que le propulsor se calienta, es muy probable que el pistón tenga un excesivo juego con el cilindro y al momento de la combustión éste golpee las paredes.

Solución: Si es tu caso, lo más recomendable es que lleves de inmediato tu auto al taller para que el mecánico revise el juego entre el pistón y el cilindro. Si esa holgura se mantiene puede degenerar en una avería más grave.

Silbido. Este ruido se puede dar porque la junta del múltiple de escape esta ‘soplada’ o una manguera de vacío está defectuosa. Dichos falla también cambian el sonido que produce el motor.

Solución: Si bien este ruido no representa una falla de alta gravedad, en caso el sonido se produzca por una junta de escape soplada se puede presentar una leve pérdida de potencia. Lo mejor es llevarla al taller para que la solucionen.

Golpeteo. Una de las posibles causas que origina este ruido es la desincronización en la distribución del motor, donde la válvula no regresa del todo a su posición de reposo y choca con la cabeza del pistón.

Solución: Deja de conducirlo y llévalo en grúa al taller para que el mecánico revise la sincronización de tu vehículo. Si lo sigues conduciendo puedes provocar que el pistón doble la válvula y la reparación te saldrá más costosa.

Fuente: fullcustom.es / parabrisas.perfil.com / aficionadosalamecanica.com

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